La palabra amor se ha convertido en un pozo sin fondo, ha perdido su significado real para albergar la atracción, la seducción y en un día como hoy el consumismo. El amor no es estar con una persona, no es quedar a cenar o escribir sms o poner en el estado del facebook que quieres a tu pareja. El amor implica esfuerzo y sacrificio, en un mundo en el que nigún valor parece fuerte y en el que a lo que se aspira es a lo fácil lo que tiene la gran mayoría, no es amor. No hay felicidad sin amor y no hay amor sin renuncias.
Hay que ser constante, comprensivo, luchador y apoyo, el amor es un camino complejo. Todos los seres humanos necesitamos querer y que nos quieran, el gran miedo del hombre es la soledad. Pensar que nadie te acompañará a lo largo de tu vida o que nunca serás capaz de sentir el verdadero amor. Estos son los problemas que internamente cada uno de nosotros tiene, a veces no cuesta reconocerlo y para otras personas reconocer que tienen miedo a la soledad supone desnudarse, pero la verdad es que son inquietudes corrientes propias de los hombres.
Cuanto fracaso escolar, cuanta desilusión y cuantas frustaciones por no conseguir lo que uno creía que iba a ser fácil. En esta vida lo más gratificante para uno es aquello que se consigue a base de esfuerzo.
La vida es complicada, habrá muchas victorias y muchas derrotas pero no hay otra forma de crecer que no sea peleando cada batalla, nunca hay que darse por vencido, la vida está llena de oportunidades. Nadie en esta vida te va a regalar nada, por ello hay que sacar y mostrar lo mejor de uno SIEMPRE. Pero como he dicho antes el esfuerzo tiene después una gran recompensa, merece la pena intentarlo. La vida es el camino, hay que poder mirar hacia atrás y saber que luchaste y te esforzaste todo lo posible.
Espero que algún día la gente no necesite un día para celebrar que se quiere de verdad, en este mundo hace falta mucho amor del bueno pero no los 14 de febrero sino los 365 días del año.





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