No siempre las cosas son lo que parecen

En ocasiones, quizás las señales más evidentes o superficiales son por las que nos dejamos llevar. Desgraciadamente en nuestra corta y obstinada manera de mirar perdemos en muchas ocasiones la perspectiva.

Dónde alguien escucha ruido, otros perciben melodías

Dónde algunos sólo ven manchas, otros ven ideas.

Antonio Saura

Como explica muy bien este resumen de la anécdota del libro "Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva". Las cosas que vemos en la superficie, no tienen por qué ser como creemos.

La gente iba en el metro, cuando se sube un padre con sus tres hijos. Los niños comienzan a incordiar, a gritar, la gente comienza a estar un poco molesta. En ese momento una persona decide llamar la atención al padre_ ¿Podría controlar más a sus hijos? a lo que el padre contesta: -Perdone, tiene usted razón, venimos del hospital acaba de morir su madre, y estoy pensando en como decírselo. 

También la historia de figuras que se han considerado provocadores, ¿realmente lo eran o la provocación estaba en el que miraba?. Balthus, pintor polaco, fue especialmente criticado por considerarse sus pinturas una forma de pornografía, incluso tacharlo de pederasta por retratar a niñas desnudas. 

Él, simplemente trataba de explicar sus pinturas, diciendo que "Las niñas son las únicas criaturas que todavía pueden pasar por pequeños seres puros y sin edad. Las jóvenes adolescentes nunca me interesaron más allá de esta idea". "Las niñas para mí son sencillamente ángeles y en tal sentido su inocente impudor propio de la infancia. Lo morboso se encuentra en otro lado".

No siempre las cosas son tan evidentes como creemos, ¿acaso no merecemos el beneficio de la duda? ¿acaso no es atrevido saber o pensar por quién se dicen las cosas o la forma en la que se dicen?.

Todavía nos queda mucho por aprender...